- La fiscalía general del estado ha desestimado la demanda
de un consejero del poder judicial contra su presidente.
- ¿Y?
- Pues que es una vergüenza.
- ¿Una vergüenza? ¿El qué?
- Los viajes de fin de semana de este hombre, con cargo al
presupuesto.
- ¿Eso? ¿Y comparado con qué, es una vergüenza, si puede saberse?
- Pues con…
- ¿Con los viajecitos del Rey? ¿Con las vacaciones del
Presidente del Gobierno en Doñana? ¿Con los viajes de políticos y paniaguados, incluidos
los miembros del CGPJ, con sus familias a medio mundo sin ninguna razón de peso
que lo justifique? ¿Con los privilegios de diputados, senadores y parlamentarios autonómicos? ¿Con
la utilización, por autoridades de toda laya, de los coches oficiales para
fines particulares o de partido? ¿Con el nombramiento, como asesores de cualquier cosa, de legos en la materia o de completos imbéciles?
- Yo me pago mis vacaciones. Comparado conmigo.
- Vaya comparación. Tú no tienes más remedio que pagártelas. Habría que ver lo que harías si pudieras endosárselas a cualquier chiringuito público. El presidente del Consejo General del
Poder Judicial, la cuarta o quinta autoridad del Estado, no puede compararse con un pringado que necesita
el salario de un mes para pasar dos días en un hotel de lujo de Marbella.
- Alguna vez habrá que empezar a poner orden en este país. Ese
hombre ha cometido un delito…
- Sólo si lo dice el fiscal. Y después tendrían que ratificarlo sus colegas en el Tribunal Supremo. Y el fiscal no va a abrir la
caja de los truenos por 8000€ en un país donde se rescata a los bancos con
miles de millones de dinero público y se premia la ineptitud en la gestión con
despidos de un millón o dos. Además, habría que saber que ocultas y seguramente
espurias razones hay detrás de la denuncia de un consejero que ni siquiera se
había tomado la molestia de informar a sus compañeros.
- Lo que ha conseguido el fiscal es que la gente se lo piense dos veces antes de denunciar estas cosas. A partir de ahora la impunidad será aún más clamorosa.
- Justamente. También de eso se trata.
- Y puede que acabemos todos convencidos de que la vía judicial no es la mejor forma de solucionar estas cosas.